
El Espinar honra a D. Abundio García Román: un legado de fe, trabajo y comunidad
El Ayuntamiento de El Espinar ha iniciado el proceso para conceder a D. Abundio García Román el título de Hijo Adoptivo Predilecto del municipio. Con este reconocimiento, la localidad desea rendir homenaje a un hombre cuya vida estuvo dedicada al servicio, la fe y la dignidad del trabajo, valores que dejaron una huella imborrable en generaciones de espinariegos.
El nombre de D. Abundio García Román evoca respeto, gratitud y admiración en El Espinar. Sacerdote y fundador de las Hermandades del Trabajo, su vida fue una entrega constante al prójimo, guiada por la fe cristiana y un profundo compromiso con la justicia social. Hoy, el Ayuntamiento ha dado un paso decisivo para reconocer oficialmente esa labor iniciando el expediente que lo nombrará Hijo Adoptivo Predilecto del municipio.
El expediente, promovido por diversas asociaciones locales, se encuentra ya en fase pública según lo establecido en el artículo 34 del Reglamento municipal de protocolo, honores, distinciones y ceremonial. El anuncio, publicado en la Sede Electrónica del Ayuntamiento, abre un plazo de quince días naturales para que cualquier vecino o institución pueda presentar alegaciones o aportaciones. Es un gesto que refuerza la transparencia y la participación ciudadana en un reconocimiento que nace del sentir común del pueblo.
La figura de D. Abundio está estrechamente ligada a la historia social y espiritual de El Espinar. Su impulso fue decisivo en la creación de las residencias Betania (Casa Madre) y Nazareth, espacios concebidos no solo como centros de acogida, sino como auténticos hogares donde la solidaridad, la formación y el trabajo se unían bajo una misma misión: dignificar la vida humana.
A través de las Hermandades del Trabajo, D. Abundio defendió el valor del esfuerzo y la necesidad de unir la fe con la acción. Creía que el trabajo no era solo un medio de sustento, sino una forma de servicio y realización personal. Su visión inspiró a muchos hombres y mujeres a construir un mundo más justo, en el que cada persona tuviera la oportunidad de crecer en dignidad y esperanza.
Su legado, visible en cada rincón de las instituciones que fundó, trasciende el tiempo. Las generaciones que lo conocieron recuerdan su cercanía, su palabra sencilla y su espíritu incansable. Quienes no llegaron a tratarlo personalmente siguen recibiendo el fruto de su obra a través de las iniciativas que hoy continúan activas, fieles al espíritu que él sembró.
El Espinar, con este reconocimiento, no solo homenajea a un sacerdote ejemplar, sino también a un ciudadano que supo transformar la fe en compromiso y la palabra en acción. La distinción de Hijo Adoptivo Predilecto representa, más que un título honorífico, un acto de justicia y gratitud hacia quien dedicó su vida a servir a los demás.
D. Abundio García Román permanece vivo en la memoria y el corazón del pueblo. Su ejemplo sigue guiando el camino de quienes creen que la grandeza de una comunidad se mide por su capacidad de cuidar, educar y trabajar por el bien común. El Espinar, al reconocerlo, se reconoce también a sí mismo.